El estilo clásico siempre ha destacado por ensalzar los muebles antiguos de manera elegante y siguiendo una decoración tradicional, mientras que el estilo moderno tiende por una decoración opuesta. Es decir, emplea muebles con diseños más actuales, líneas rectas, la horizontalidad y una paleta de colores más uniforme y clara. El aspecto minimalista, en ambos tipos de decoración es algo que tampoco suele combinar demasiado debido a que el estilo clásico, por lo general, suele ser más recargado; mientras que el estilo de decoración moderna lo es menos. Aunque no llega al nivel de la decoración japonesa, la decoración moderna suele prescindir de una gran cantidad de muebles.
En este punto te estarás preguntando cómo es posible combinar muebles clásicos con decoración moderna puesto que, al parecer, todo son pegas. Pues bien, en realidad existen una serie de aspectos y reglas de decoración que si tenemos en cuenta nos pueden ser de gran ayuda para lograr una decoración moderna y sofisticada con muebles clásicos. Te recomendamos que sigas leyendo este artículo si estás pensando en comprar muebles clásicos para tu hogar, pero no sabes si combinarán con tu decoración moderna. ¡Vamos a ello!
Características en común de la decoración clásica y moderna
La decoración moderna con muebles clásicos es posible debido a que ambos estilos tienen características que combinan entre sí. Estas deben respetarse en todos los sentidos si se quiere combinar muebles clásicos con decoración moderna, en caso contrario conseguiremos una mezcla de estilos y un popurrí de muebles que darán una sensación de desorden y discontinuidad en la vivienda. Para combinar ambos estilos es fundamental cumplir con las siguientes condiciones.
Elegancia y sofisticación
Tanto un estilo como el otro transmiten una imagen de elegancia y de sofisticación. Sí, es cierto que cada uno lo hace a su manera, pero al final es la misma imagen y por eso son dos estilos que pueden combinar entre sí con diferentes piezas. Opta, por tanto, por piezas de calidad que sean elegantes.
Luminosidad y calidez
La decoración moderna destaca por la gran iluminación —con grandes ventanales, espacios despejados, cristaleras…—, mientras que la decoración clásica lo hace por la calidez que transmite. Ambas características pueden encajar perfectamente entre sí, por ello, debemos asegurarnos que en nuestro hogar con decoración moderna entra suficiente luz natural, sobre todo en la zona en la que colocaremos los muebles clásicos.
Combinar muebles clásicos y decoración moderna: lo que debemos tener en cuenta
Una vez explicadas las condiciones que hay que reunir para tener una decoración moderna con muebles clásicos, vamos a ver ahora de qué forma podemos lograr que la combinación quede perfecta.
La decoración moderna debe predominar
No supondrá un problema ya que es más común contar con una decoración moderna que con una clásica. Lo bueno de la decoración moderna es que suele admitir piezas clásicas, mientras que al contrario suele ser más complicado. Ahora bien, sin pasarse. No se trata de repartir la estancia o estancias a partes iguales y hacer uso por igual de muebles modernos y clásicos, no. Nuestra recomendación es que te hagas con un par de piezas o tres de estilo clásico. Ten en cuenta que la decoración clásica tiene mucha presencia ya que esta sirve para crear atmósferas de lujo y sofisticación, si te pasas opacarás al resto. Por supuesto, ten en cuenta que la cantidad de piezas depende del espacio que tenga tu estancia. Si tienes un comedor pequeño, por ejemplo, opta por instalar un único mueble clásico. Recuerda que la decoración moderna siempre debe predominar.
Instala los muebles clásicos en lugares estratégicos
Los muebles clásicos pueden ser de todo tipo, como son los sofás, las mesas de comedor y las mesas de centro, las sillas, los recibidores, los aparadores, las vitrinas, los espejos, las cómodas y los zapateros, entre otras. Nuestra recomendación es que los instales enfrentados entre sí, es decir, nunca coloques un mueble al lado de otro, si no uno enfrente del otro o repartidos a lo largo de toda la sala. Como son los muebles menos abundantes de la habitación, asegúrate que tengan un espacio especial. Es decir, instálalos en un lugar donde sean visibles, donde se lleven la atención nada más entrar a una habitación. Los muebles clásicos tienen presencia y nuestro objetivo es resaltarla.
La elección del sofá
El sofá siempre es uno de los muebles que más presencia tienen y una de nuestras opciones más recomendadas a la hora de combinar muebles clásicos y decoración moderna, al igual que hacemos también con los aparadores. Existen varios tipos de sofás clásicos, aunque el más popular y famoso es el sofá Chester. Este se adapta a todos los estilos, incluso a la decoración del tipo industrial. Además, el capitoné de este tipo de sofá está disponible en varios colores y tapizados, aunque el más común de todos es el de piel marrón oscuro. Otro tipo de sofás que puedes utilizar para llevar a cabo la decoración moderna con muebles clásicos es el sofá tresillo. Además, hay muchos modelos clásicos de este tipo. Por último, te recomendamos que optes por los sofás de dos plazas. En este caso, hazlo solo si tienes pensado comprar dos unidades que quedarán enfrentadas o una al lado de la otra, pero con espacio entre ellas. Te recomendamos que evites, en este caso, los sofás más modernos —como los modulares o los chaise longue— ya que al ser un mueble con tanta presencia acabarás opacando al resto de muebles clásicos que puedas haber instalado.
El color para la decoración moderna con muebles clásicos
Como indicábamos a lo largo de este artículo, el estilo que debe predominar es el moderno. Por ende, debemos fijarnos en la paleta de colores que es más habitual en este estilo, y esta se compone de blanco, gris y beige. Por supuesto, no todos los ambientes modernos deben tener únicamente estos colores, aunque sí es recomendable que sean los predominantes. Por ello, también puedes incorporar elementos más oscuros o tonos apagados como el negro. Así mismo, puedes crear microambientes revistiendo unas zonas específicas de la pared, como el espacio para la televisión, el mueble de la chimenea… En estos últimos casos te recomendamos azulejos para paredes.
